sábado, 21 de marzo de 2009

Tocamos a dos balas por cabeza

(LINK: http://www.elmundo.es/metropoli/2008/11/28/teatro/1227888706.html)

Lunes, 1 de diciembre de 2008. Actualizado a las 09:30 (CET)

TEATRO

Tocamos a dos balas por cabeza
Un viaje a través de los entresijos de la cultura popular, los dogmas, las religiones y las supersticiones

TOCAMOS A DOS BALAS POR CABEZA Dónde: La nave de Cambaleo, Aranjuez Avda. Loyola, 8 (Antiguo Matadero Municipal) Cuándo: 28, 29 y 30 de noviembre a las 21 horas Interpretación: David Climent, Pablo Molinero, Pablo Rega y Nacho Vera

CANDELA MARTÍN

Dentro del marco del Circuito de la Red de Teatros Alternativos se encuentra 'Tocamos a dos balas por cabeza', una obra creada por la compañía catalana Los Corderos, que llega a Aranjuez para pasar el fin de semana en La nave de Cambaleo.

Se trata de un montaje que pretende adentrarse en un viaje quimérico-utópico por los entresijos de la cultura popular, los fanatismos, la superstición o el lenguaje.

'Tocamos a dos balas por cabeza' es, ante todo, una creación que busca comprender un poco mejor los comportamientos que diferencian al ser humano del resto de seres vivos.

Los Corderos se centran, esta vez, en las creencias más arraigadas de la humanidad, ya que algunas de ellas se acercan peligrosamente a la patología.

Es el cuarto espectáculo de este grupo teatral barcelonés que, como explica uno de sus creadores, David Climent, nunca había "tratado como protagonista el tema de la comunidad". Este montaje habla "de la parte más ascentral del ser humano como miembro de un grupo y de cómo éste percibe distintos temas como los dogmas, la religión o las leyendas."

¿Pasado o futuro?

Las reacciones de los espectadores ante la obra son ambiguas, ya que se presta a múltiples interpretaciones. "Algunos nos dicen que suena a pasado. En realidad, nosotros hablamos del futuro, pero sabemos que se trata de algo verdaderamente real y actual, por lo que podría trasladarse a cualquier época", afirma Climent.

'Tocamos a dos balas por cabeza' hace, al mismo tiempo, una retrospectiva sobre por qué el ser humano ha terminado convirtiéndose en lo que es, así como un pronóstico de lo que podría pasarle si continúa evolucionando como hasta ahora.

"Tenemos diferentes historias para contar lo mismo", explica el creador. "Lo que nos interesa del hombre no es lo que sabe, sino lo que no conoce, la capacidad que tiene para inventarse aquello sobre lo que no tiene control".

Así, el montaje es el enunciado -o más bien el epitafio- de una civilización futura aún no nata. Una sociedad cuyos valores y convenciones, diferentes a los vigentes actualmente, aunque claramente inspirados en ellos, aspiran a una existencia que quizá hoy en día relacionaríamos con la locura.

Los Corderos hablan sobre un mundo donde las armas se multiplican, los bienes naturales se agotan y sectas se reproducen. Una época no claramente definida donde el arte no acaba de tener un sentido más allá del meramente estético o mercantil.

Una obra diferente para cada edad

Ante una representación teatral así, muchos podrían pensar que las personas mayores no se sentirían identificadas con los temas que tratan.

Sin embargo, como asegura David Climent, "las personas de sesenta años para arriba son las más analíticas de nuestros espectadores, ya que utilizan sus experiencias para entender el argumento de una forma más profunda".

Los jóvenes, sin embargo, "tienden más a quedarse con la parte cómica y encuentran divertidas cosas que los mayores ya no identifican como bromas".

Y es que, al fin, 'Tocamos a dos balas por cabeza' no debe, como opina David, "definirse como algo cerrado, como una sola historia argumental", sino que constituye "un viaje por el que se puede pasar por muchos lugares, donde hay que estar abierto a todo".

No hay comentarios:

Publicar un comentario